Las probabilidades de que se establezca el patrón en 2014 son de por lo menos 50%, y cinco de ocho modelos climáticos sugieren una posible instalación durante la primavera, que comienza en septiembre, informó este martes 12 de agosto en su sitio web la Oficina de Meteorología. De ocurrir el fenómeno, no es probable que sea fuerte, agregó.
El Niño puede afectar los mercados agrícolas, dado que los productores enfrentarían sequía o exceso de lluvias. Los cultivos que corren mayor peligro son aceite de palma, cacao, café y azúcar, según Goldman Sachs Group Inc. Los Estados Unidos redujeron la semana pasada las probabilidades de un desarrollo del patrón en 2014 y pronosticaron que, de producirse, sería débil.
“Debido a un debilitamiento de los alisios, se ha generado cierto calentamiento en la zona central y este del Ecuador en el océano Pacífico en la última quincena”, dijo el pronosticador de Melbourne. “Si los alisios siguen siendo débiles, es posible un mayor calentamiento que se acerque al umbral de El Niño”.
Las probabilidades de un establecimiento del patrón declinaron a 65% durante el otoño y principios del invierno del hemisferio norte, indicó el 7 de agosto el Centro de Pronóstico Climático de los Estados Unidos. En julio la probabilidad era de casi 80%. La posibilidad de una instalación del fenómeno este otoño e invierno son menores que estimaciones anteriores, explicó este 12 de agosto la Agencia Meteorológica de Japón.
Fuente: Laprensa